Lo mas visto

lunes, 31 de agosto de 2015



HELADO CASERO DE MENTA Y CHOCOLATE

INGREDIENTES:

  • 7 yemas de huevo.
  • 1 taza de nata (250 ml.)
  • 2 tazas de leche entera (500 ml.)
  • Azúcar 3/4 de taza (170 grs.)
  • 1/4 cucharadita de sal.
  • Pepitas de chocolate 3/4 de taza (150 grs.)
  • Colorante verde y aroma de menta.

REALIZACIÓN:


   En un cazo ponemos la leche y la nata a calentar a fuego lento. Mientras en un bol batimos las yemas y el azúcar con ayuda de una batidora eléctrica. Cuando veamos que empiezan a coger un  tono  más claro, estarán en su punto.  Antes de que hierva la leche, con ayuda de un cazo vamos añadiendo la leche a los huevos poco a poco y seguimos batiendo con la batidora. Una vez que esté todo bien unido lo volvemos a echar en el cazo y lo cocemos durante unos 5 o 6 minutos, sin que llegue a hervir. Sabremos que nuestra crema está lista cuando pasemos un dedo por la cuchara y se quede la marca de nuestro dedo.


Ponemos la leche y la nata a cocer.
Batimos las yemas con el azúcar.

  Usaremos un colador para que nuestra crema quede más suave, que no nos aparezca un hilo de huevo o un rastro de nata.  Lo cual sería muy desagradable al paladar.  Tapamos nuestro recipiente con papel film y lo dejamos en la nevera por lo menos 5 horas, lo ideal es dejarlo toda la noche.

   A la mañana siguiente sacamos nuestra crema de la nevera que habrá espesado y le añadimos una pizca de sal, la esencia de menta (yo no encontré esencia de menta, pero conseguí  menta y chocolate, al fin y al cabo es lo que iba a preparar). Echamos una gota y probamos porque la menta es bastante fuerte no es como la vainilla que puedes echar más cantidad, yo al final eche unas 3 gotas, pero ir probando hasta que esté de vuestro agrado. Y también colorante verde esto es opcional por supuesto, pero también la comida se disfruta con la vista y si estamos tomando helado de menta mejor que sea verde verdad y además el contraste con las pepitas de chocolate es fantástico.
Añadimos la leche a los huevos.

Batimos todo el conjunto.

Ponemos otra vez toda la mezcla en el cazo.

Hacemos la prueba de la cuchara para saber si está en su punto.

   Pasamos nuestra crema a un molde que pueda ir a la nevera, podéis usar un tuper, las pepitas de chocolate no se añaden todavía, habrá que esperar a que el helado esté más formado.




Colamos la crema.
La tapamos con papel film para que no se escarche.

   Metemos el helado en la nevera y pasados 45' quitamos el recipiente y movemos con una cuchara, los alrededores de arriba hacia abajo. Lo volvemos a poner en el congelador. Pasados otros 45 ' volvemos a realizar la misma operación. Lo volvemos a guardar y otra vez 45' después repetimos la operación pero esta vez le añadimos las pepitas de chocolate. Removemos y ya introducimos el helado en el congelador.
Introducimos nuestra crema en la nevera toda la noche.

Añadimos la esencia y el colorante.
Pasamos la crema a un recipiente.
Pasados 45' removemos.

Otros 45' después removemos con una cuchara.
Cuando ya se empiece a congelar le añadimos las pepitas de chocolate y removemos.
Nuestro helado listo para servir.

   Lo quitaremos 15' antes de servir.



MERMELADA DE PEXEGOS CASEROS
PARA THERMOMIX


INGREDIENTES:

  • 500 grs de fruta.
  • 500 grs de azúcar.
  • 1 zanahoria.
  • 1 limón sin piel ni pepitas.
Mis pexegos recién recolectados.

 REALIZACIÓN:

   Primero le quitamos la piel a los pexegos y el hueso claro, los cortamos en trozos y los ponemos en la thermomix, añadimos la zanahoria pelada y cortada, el limón sin piel y sin  pepitas y el azúcar.        Programamos 15 segundos  la Thermomix a velocidad 6, si deseaís que vuestra mermelada tenga más tropezones la poneís menos tiempo, yo la dejé así,  pero para gustos ya sabéis.
  Luego 20 minutos  a temperatura varoma y  velocidad 1.
Ponemos los pexegos en la Thermomix 500 grs.

Le añadimos el azúcar, la misma cantidad.
  
Añadimos la zanahoria y el limón sin piel ni pepitas.



  Un truco: Para saber si está bien densa yo echo una gota en un plato y espero  un poco a que se enfríe. Yo después de probar aún no estaba así que la dejé otros 5 minutos  a la misma temperatura y velocidad.
Probamos en un plato la textura de nuestra mermelada.
Vais probando hasta conseguir la consistencia deseada.



Como no se puede tapar recorto papel vegetal, para que no entre alguna mosca y  cuando enfría un poco la tapo.
Le pongo papel vegetal.

   Una vez que haya enfríado nuestra mermelada le retiro el papel y la tapo.
   Si por el contrario hemos preparado varios tarros de mermelada porque la cosecha ha sido buena, ejem. Sin dejar que se enfríen, llenaremos los tarros de cristal hasta el dibujo de la rosca. Taparemos y colocaremos los tarros boca abajo hasta que se temple la mermelada. De esta forma se creará el vació en el interior, que nos garantiza la conservación en condiciones al menos durante 3 meses.



   La razón de añadirle zanahoria a esta mermelada casera es que es un  espesante natural además de que la zanahoria es la más mineralizante y vitaminizante de todas las raíces, es recomendada para cualquier clase de enfermos.
   Al comerla cruda además de tener un excelente sabor, ayuda a fortalecer los dientes y las encías.
   Debido a las sustancias aromáticas que posee la zanahoria, es muy buena para estimular el apetito y muy usada para la gente que padece anemia.
   Es muy útil para eliminar los cólicos y disipa los gases que emite el organismo. Ayuda a quienes padecen de estreñimiento y tienen dolor de estómago, en este caso se recomienda tomarla cruda y rallada.
   Este vegetal por su elevado contenido en agua es diurético y ayuda a la desintegración de los cálculos renales. Es  antioxidante,  rica en potasio y fósforo, es un excelente vigorizante.  Fortalece las uñas y el cabello, al que aporta brillo. Las celulas madres de la zanahoria son ricas en betacaroteno, también llamado provitamina A, que en el organismo se transforma en Vitamina A.   
   Estos compuestos reparan las células dañadas por los efectos ambientales, y así fortalecen y revitalizan las uñas y el pelo.  Tiene propiedades naturales para mejorar la vista y un eficaz protector de la piel. 
   Mejora la calidad de la leche materna. El betacaroteno y la vitamina A mejoran la calidad biológica de la leche materna. 
Árbol  Pexegueiro.


   Ya sabéis animaros a hacer mermeladas, bueno conservas en general,no os imaginais la cantidad de alimento  que tiramos, que  se nos pasa y esta es una manera de conservarla durante meses, (judías, pimientos, melocotones,etc.) porque  sobretodo si os juntáis con mucha cantidad, cuando es época de recolección y podéis hacer mermelada que os durará meses y que de sabor es deliciosa y además muy sana y también nos ahorramos unas pelillas que viene muy bien para el bolsillo en estos tiempos de crisis.





miércoles, 26 de agosto de 2015











MERMELADA DE MORAS SILVESTRES

INGREDIENTES:

  • 0,500 kg. de moras.
  • 0,300 kg. de azúcar.
  • Zumo de  1/2 limón.
  • Frascos para conservar en vacio.
  • Hay recetas que ponen la misma cantidad de fruta que de azúcar, yo prefiero que no sea tan dulce, vamos sin tantas calorías.


REALIZACIÓN:

   Esterilizamos los tarros donde vamos a guardar la mermelada, los colocamos junto con las tapas dentro de una olla, cubiertos de agua y los dejamos hervir 15'. Los mejores tarros son de cristal con cierre hermético.
Esterilizamos los tarros donde envasaremos la mermelada.

   Quita los rabitos de las moras y lávalas debajo del grifo, para quitarles el polvo.  Ponlas en en un recipiente, espolvorea con azúcar y dejalas en maceración por lo menos unas 5 horas o si podéis toda la noche.
Las moras lavadas y sin rabitos.

   Al día siguiente, vuelca el contenido del recipiente en un cazo donde harás la mermelada, usa mejor una olla grande para evitar que cuando llegue a ebullición el liquido se derrame, tenemos que asegurarnos que el líquido no ocupe más de la mitad de la olla y añadele el zumo de limón, que hará de conservante natural.
Ponemos las moras en una fuente.

Le espolvoreamos el azúcar por toda la superficie y las dejamos macerando.
 
   Pon la cazuela a fuego medio y deja hervir unos 35-40 minutos, removiendo de vez en cuando y retirando la espuma.

Yo las tuve 5 horas en la nevera.
   Cuando la mermelada esté lista, retírala del fuego y, si se desea una textura más fina, se puede triturar con la batidora o el pasapurés.
   Rellena los tarros de cristal previamente esterilizados con la mermelada y ciérralos bien. Ponlos boca abajo y mantenlos así durante 24 horas para que hagan el vacío. Otra opción para hacer el vacío es meter los botes en una cazuela al baño maría y dejarlos unos 30 minutos desde que el agua rompa a hervir.
   Después, déjalos enfriar y sécalos.  De este modo la mermelada se conservará perfectamente durante unos meses.





Le añadimos el zumo de medio limón.

   Para saber si la mermelada está hecha, podemos poner un poco de mermelada en un plato. La dejamos enfriar unos minutos y deslizamos el dedo por el plato arrollando la mermelada, si está hecha tendrá que hacer unas pequeñas arrugas.
Removemos con una cuchara de madera.

   Si te pasas de cocción al final podrás añadir un poco de zumo de limón o incluso un poco de agua caliente hasta que tenga la textura deseada.
Cuando se vaya formando la mermelada le bajamos el fuego.

   Llenamos los botes hasta arriba, los cerramos bien.  Una vez envasados la dejamos enfriar, los etiquetamos y los guardamos  en un lugar que no le de la luz y  que sea seco.
Tenemos nuestros tarros listos.

  

En plena recolección,jeje.


  

  Para su recolección hay que elegir las de color negro brillante y, una vez en casa, guardarlas en el frigorífico. Así se conservarán unos 3 días.
   Las moras son recomendadas en las dietas de adelgazamiento dado su bajo aporte calórico.
   Aunque su uso más habitual se da en repostería, esta fruta también se convierte en contrapunto perfecto para recetas saladas: platos de cordero, cerdo, pato, carnes de caza o para acompañar a algunos foies.
   Cuando está madura tiene propiedades laxantes y depurativas, por lo que ayuda a mejorar el transito intestinal, y también a eliminar toxinas del organismo. 
Tendremos que coger las moras que están negras de color brillante, ya notareis que las rojas están duras como piedritas.



   Merece la pena dedicarse una tarde a la recolección de moras, es muy divertido y gratificante. Y muy agradable dar un paseo, eso si acordaros de llevar una bolsa para guardar vuestras moras. Yo la próxima vez hasta puede que me meta un guante, jiji, para evitar los rasguños y las picaduras de las zarzas, pero también es cierto que es lo diverido de ir a buscar moras, intentar hacerse el menor daño posible y conseguir la mayor cantidad de moras. Además estamos tan acostumbrados a ir al supermercado a por todo hasta a por el  perejil y es un gustazo conseguir sustento uno mismo y además hacer algo de ejercicio y estar en contacto con la naturaleza. Yo en breve vuelvo a por más moras y si alguien se apunta mejor, jeje, más divertido.

Recuerdos de una tarde estupenda.












CREMA DE MORAS Y MANZANAS


INGREDIENTES:

  • 1/2 kilo de moras.
  • 100 grs. de azúcar.
  • 4 hojas de gelatina.
  • 1 manzana.
  • 8 cucharadas de zumo de manzana.
  • 1 limón.
  • 2 huevos.
  • Nata líquida.


Un consejo para montar las claras a punto de nieve, podéis coger unos cubitos de hielo en un bol grande e introducir otro más pequeño con las claras para montar, el frío de los hielitos le van a ayudar a subir, a conseguir esos picos de espuma y sabemos que están a punto de nieve, cuando les damos la vuelta y no se caen.

REALIZACIÓN:


   La gelatina se remoja en un cuarto de litro de agua. Aparte las moras se lavan y escurren reservando unas pocas de las que mejor aspecto tengan. El resto se ponen a cocer en una cazuela, tapadas y a fuego lento, rociadas con el azúcar y el zumo de manzana.
Tenemos la manzana rallada.


   Transcurridos 10' se pasa por un chino el contenido de la cazuela y se vuelve a calentar, pero sin que rompa a hervir. Después se añde la gelatina, una vez escurrida, hasta su completa disolución, dejándola enfriar un poco antes de introducir en la nevera.



Encontraréis  zumo de manzana en vuestro supermercado.


   La manzana,  lavada y seca, se ralla  y se incorpora al puré junto con dos cucharadas de zumo de limón. Cuando la gelatina comience a cuajar, se agrega con cuidado la nata batida espesada y las claras batidas a punto de nieve. Por último se distribuye la crema en copas individuales, que se decoran con las moras que habíamos reservado previamente.

Reservar unas pocas moras para decorar.

     

lunes, 24 de agosto de 2015




ROLL DE ARÁNDANOS Y LIMÓN

INGREDIENTES:
Para unos 16 rolls aproximadamente.
  • 1 sobre de levadura de panadería.
  • 3/4 de taza (180 ml) de leche entera.
  • 1/4 de taza (60 ml) de agua.
  • 1/4 de taza (50 grs) de azúcar granulada.
  • 1/4 de taza (60 grs) de mantequilla derretida.
  • 1  cucharadita de extracto  de vainilla.
  • 1 huevo.
  • 1 cucharadita de sal.
  • 4 tazas de harina. (400 grs)
  • 2 cucharadas (30 grs) de mantequilla derretida para pintar antes de hornear.
Rolls individuales.
PARA EL RELLENO:

  • 2 tarrinas de arándanos (250 grs).
  • 1/4 de taza (60 grs) de mantequilla sin sal.
  • 1/2 taza (115 grs) de azúcar.
  • Ralladura de un limón.
PARA EL GLASEADO:

  • 1/4 taza (60 grs) de crema de queso tipo "Philadelphia".
  • 1 cucharada (15 grs) de mantequilla a temperatura ambiente.
  • 1 y 1/4 taza (250 grs) de azúcar glas.
  • 1/2 cucharadita de extracto de vainilla.
  • El  zumo de medio limón. (aproximadamente unas dos cucharadas depende del limón)
  • 4 cucharadas (60 ml)  de leche entera.
  • Colorante amarillo.

REALIZACIÓN:

Dejaremos la masa levedar 2 horas.
Estiramos la masa y la trabajamos con las manos.

    Primero ponemos a calentar el agua, se calienta hasta 115º, no más ojo. Le añadimos la leche, el sobre de levadura y una cucharadita  de azúcar, que espolvoreamos por encima. Y lo dejamos así unos minutos, sin remover.  Mientras seguimos con los otros ingredientes.
   En un bol echamos las 4 tazas de harina,  1/4 taza de azúcar y una cucharadita de sal. En un recipiente mezclamos la mantequilla derretida, el huevo y el extracto de vainilla, lo añadimos a la mezcla que teníamos levedando, que ya se habrá disuelto la levadura, mezclamos bien y lo incorporamos al bol que tenemos con los ingredientes secos.
Pintamos de mantequilla derretida.

Le añadimos la ralladura de un limón.
   Amasamos durante unos 5 o 7 minutos, cuando veamos que nuestra masa se despega de las paredes, la dejamos en un recipiente tapada con un trapo unas dos horas para que levede.
   Pasadas esas dos horas nuestra masa habrá doblado su tamaño, echamos harina sobre nuestra superficie de trabajo y estiramos la masa, ayudandonos con los dedos, la iremos aplastando. Una vez que la tengamos estirada, con ayuda de un pincel la pintamos con la mantequilla derretida, le ponemos la ralladura de un limón y la espolvoreamos con azúcar.
Espolvoreamos con azúcar.

Distribuimos los arándanos.
   A continuación disponemos los arándanos por toda nuestra masa estirada. La enrollamos como si de un pergamino se tratase, y vamos cortando los rolls, separamos los trozos que nos quedan en las esquinas, luego los aprovecharemos.
Enrollamos como si fuera un pergamino.

Nos ayudamos con las manos para darle forma.
   Al cortarlos tendremos que ayudarnos con las manos para conseguir la forma del roll. Es facil que se nos pierda un poco la forma de espiral, o que algún arándano se nos quiera escapar, je,je.
   Tenemos un molde redondo untado con mantequilla y vamos poniendo los rolls de arándanos y limón, los dejaremos un poco separados, porque luego van a aumentar de tamaño y se unirán.
Cortamos tiras de nuestro rollo de masa.

Iremos colocando los rolls.
   Untamos nuestros rolls de mantequilla derretida, ayudandos de un pincel, así también no se desharán y quedarán deliciosos.
   Yo el resto de los rolls los he puesto en una bandeja de silicona para magdalenas.
   Ahora  los tapamos con un trapo y los dejamos levedar una media hora aproximadamente, o hasta que doblen su tamaño.
Pintamos con mantequilla derretida.

   Mientras están levedando encendemos el horno a 170 º, tendremos nuestros rolls unos 30' aproximadamente.
Media hora después habrán doblado el tamaño.

   Preparamos el frosting de limón (lo podemos  hacer mientras se hornean los rolls). Mezclamos en un bol 1/4 taza (60 grs) de queso tipo "Philadelphia", 1 cucharada de mantequilla a temperatura ambiente, 1 y 1/4 tazas de azúcar glas (250 grs), el zumo de 1/2 limón y 4 cucharadas de leche entera. Yo le añadí un poco de colorante amarillo.
Nuestros rolls de arándanos y limón.

   Esperamos a que enfríen un poco los rolls, y con ayuda de un pincel les pintamos el frosting de limón.
   Teneis que probarlos están riquisimos, tienen una textura parecida a los bollos de leche, blanditos, esponjosos  y con los arándanos, que parece que estallan en tu boca, dulces, deliciosos,
y el contraste ácido del limón, ayy que ricos. Poneos con la receta, merece la pena.