PASTEL DE QUESO JAPONES 

CON SOLO 3 INGREDIENTES

INGREDIENTES:

• 4 huevos.
• 160 gr. de chocolate blanco.
• 160 gr. de crema de queso.
• azúcar glas para espolvorear.
• un molde de 12 cm.

REALIZACIÓN:

Nuestro pastel quedará con una textura de mousse.

   Separamos las claras de las yemas, primero batimos las yemas junto con la crema de queso. 

En un cazo al baño maría ponemos el chocolate blanco a derretir, cuando esté fundido yo lo paso a un plato y lo trabajo un poco hasta que se vuelva mas cremoso y una vez que se haya enfriado lo incorporamos a la mezcla anterior.

Batimos las claras a punto de nieve y reservamos.

   Montamos las claras a punto de nieve y se las incorporamos al bol en dos veces y con sumo cuidado para que no se bajen, yo me ayudo de una espátula y las mezclo de arriba hacia abajo muy suavemente.

Incorporamos las claras cuidadosamente.

   Tenemos el horno pre calentado a 170 º  en una fuente de horno ponemos el agua caliente en la que fundimos el chocolate blanco y dentro el molde de nuestro pastel, yo le puse un papel de horno en la parte de abajo para que fuera mas fácil despegar el pastel del molde y usé uno de los que se separan para que nos facilite el trabajo.

Ponemos agua caliente en la bandeja de horno.

   Este pastel se hornea a tres temperaturas, primero lo tendremos 15' a 170 º, pasados esos minutos, bajamos la temperatura a 160 º otros 15 '. Y para finalizar ya apagamos el horno y dejamos nuestro pastel otros 15 '. Yo lo dejé unos minutos mas con el horno apagado y tibio y me quedó genial, es probable que si lo quitáis del horno aun estando caliente se os puede bajar, yo por si acaso no me arriesgue y me quedó de foto.

  

Ponemos el molde en el centro de la bandeja.

   Lo sacamos y lo dejamos enfriar sobre una rejilla antes de desmoldarlo, al utilizar un molde de los que se abren nos será muy cómodo y lo pasamos a una bandeja, por último lo espolvoreamos con azúcar glas.

El pastel al hacerse se separa de las paredes.

   Este pastel queda super esponjoso, tiene a una textura parecida a un flan, tipo mousse, se hace muy rápido y gusta mucho, además es muy fresquito, ideal para tomar después de una comida copiosa, perfecto para los meses de verano que están ahí a la vuelta de la esquina.

Antes de espolvorear con azúcar glas.

Lo dejamos enfriar unos minutos antes de des moldar.